Muchos, la mayoría de los votantes de EEUU y de los observadores del mundo piensan que solo es un debate de demócratas contra republicanos, y viceversa. Incluso defensores de la ideología de género (demócratas) o la selección de seres humanos por discriminación. Pero hay otro factor menos visible y más trascendente: la justicia que afectará a la manera de pensar y por lo tanto de actuar.
Efectivamente, la justicia, las decisiones legislativas de los políticos así como la interpretación de estas según la ley de los jueces, harán que las personas definan el sentido de la vida, la moral y su manera de actuar en consecuencia en un sentido u otro.
Religión en Libertad trae un artículo muy interesante (que puedes leer íntegro aquí) que plasma de forma analítica en caso de que los demócratas vencieran en estas elecciones y entonces cambiarían los siguientes aspectos más básicos:
1º Las empresas privadas podrían verse forzadas a incluir en los seguros que pagan a sus empleados fármacos abortivos, independientemente de las convicciones de sus dueños.
2º La oración en las instituciones legislativas sería severamente regulada en términos de contenido (limitándose a invocaciones genéricas e indistintas) y de oradores (miembros de religiones distintas según un sistema de cuota a determinar), en perjuicio de la tradición que asigna contenidos y oradores cristianos a esos momentos, conforme a la abrumadora mayoría cristiana en el país.
3º Se podria negar a los ciudadanos la posibilidad de desgravar de sus impuestos las contribuciones a instituciones que patrocinan la escolarización en colegios cristianos.
4º Una cruz (o cualquier otro símbolo o monumento cristiano) en honor a los soldados estadounidenses caídos en combate situada en un espacio público de titularidad federal podría retirarse solo con que lo pidiese una única persona, incluso si está situada dentro de una zona privada del terreno público.
5º El aborto por nacimiento parcial, que consiste en un parto del bebé completamente formado aspirando el interior de su cerebro y aplastándole el cráneo para facilitar su salida, se podría practicar libremente en todo el territorio estadounidense sin restricción alguna.
6º Los monumentos donde figuran los Diez Mandamientos podrían quitarse de cualquier lugar de titularidad pública solo por la objeción de una única persona, incluso si dicho monumento lleva décadas en su sitio …
7º Los Boy Scouts no podrían decidir su propia política de no admitir monitores homosexuales, y otras organizaciones sin ánimo de lucro podrían verse forzadas a admitir miembros cuya presencia perjudica significativamente la capacidad de dichas organizaciones para defender sus convicciones.
8º A los niños discapacitados que asisten a colegios privados religiosos se les podrían negar servicios educativos de refuerzo sufragados con el presupuesto federal.
9º Los discursos de contenido religioso serían discriminados y reprobados en el ámbito universitario, y a los grupos de estudiantes cristianos, precisamente por razón de sus convicciones, se les podría negar el acceso a los fondos universitarios para actividades estudiantiles que sí están disponibles para grupos no religiosos.
Como dice el artículo en su cierre: Cuando el próximo 8 de noviembre los estadounidenses voten a su presidente, estarán pues votando algo más que las políticas de los próximos cuatro años. Dado que podrían ser hasta cuatro los nombramientos judiciales en dos o incluso un solo mandato, se votará también hacia qué lado de la balanza se inclinarán durante cerca de medio siglo las decisiones del Tribunal Supremo sobre aborto, matrimonio, familia, oración pública y libertad religiosa.