Cuando se cumple el primer aniversario del terremoto que asoló Haití el 12 enero de 2010, y todavía no han llegado las ayudas internacionales a las que se comprometieron -porque en ese momento era primera fila de cartel- sólo las ONG y la Iglesia siguen al pie del cañón con unos medios escasos. Entonces irrumpe en la solidaridad el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) que mantiene su compromiso de asistencia sexual y reproductiva a la población damnificada. Y como todo el mundo sabe, un país asolado por las infecciones, la pobreza, miles de personas sin hogar, arruinados por generaciones,… Lo único importante son los condones y el aborto gratuito. ¿Y esto no es un genocidio planificado?
Condones, “Clínicas Sonrisa” y esterilizaciones quirúrgicas para los damnificados
Desde que hace un año la tierra temblase en Haití, el UNFPA se puso manos a la obra llevando a cabo ciertas actividades de control de natalidad, camufladas bajo el eufemismo de la “Respuesta Humanitaria de Emergencia en Salud Sexual y Reproductiva”. No en vano, el total de preservativos masculinos distribuidos en el periodo post-terremoto supera los 25 millones, y existe un plan para la puesta en marcha, en colaboración con el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros socios, de diez «Clínicas Sonrisa» (aseguramos que no es una broma: Así es como las han denominado sus promotores) destinadas a reforzar los “servicios de emergencia en salud reproductiva y planificación familiar”. Además, el UNFPA está asesorando a la Sociedad Haitiana de Obstetras Ginecólogos (SHOG) para la puesta en marcha de una “maternidad de referencia” (es un eufemismo como luego se verá) en Croix-des-Bouquets, con financiación para, entre otras cosas, adquirir insumos de salud reproductiva y ofrecer planificación familiar a las mujeres, particularmente contracepción quirúrgica voluntaria (no en vano, se llevan realizadas en esa “maternidad” más de una treintena de ligaduras de trompas después de mayo de 2010).
Salud Sexual y Reproductiiva camuflada como “Reducción de la Mortalidad Materna”
En el marco de la nueva política sexual y reproductiva de las autoridades sanitarias de Haití, el UNFPA está comprometido en dos proyectos de “reducción de la mortalidad materna” (es un eufemismo por lo que luego se verá) junto al MSPP y sus socios, UNICEF y OMS. El primero busca “reforzar la calidad de los servicios de salud sexual y reproductiva” en varias instituciones sanitarias. El segundo consiste, entre otras cosas, en “reforzar la participación comunitaria (sobre todo de los hombres) en salud sexual y reproductiva”.
Dispositivo Mínimo de Urgencia para la salud sexual y reproductiva en situación de crisis y postcrisis
En octubre, el UNFPA asistió al MSPP en la organización conjunta de una sesión formativa sobre el “Dispositivo Mínimo de Urgencia para la salud sexual y reproductiva en situación de crisis y postcrisis”. Con participación de personal del MSPP y socios no públicos, como las ONG del subcluster de salud sexual y reproductiva, el taller buscó aumentar el acceso a la información y a los servicios de salud sexual y reproductiva para la población afectada por la crisis, o viviendo en situación de post-crisis.
Lluvia de condones tras el terremoto
Por lo que parece deducirse a juzgar por las actividades del UNFPA, la disponibilidad de condones debe de constituir sin duda una de las principales preocupaciones de las personas afectadas por un terremoto. No en vano, en coordinación con las ONG nacionales e internacionales y las agencias de la ONU, más de 7 millones de condones fueron repartidos por el UNFPA sobre el terreno desde los primeros meses tras el terremoto del 12 de enero. En la actualidad, el UNFPA lleva ya repartidos en el area 25 millones de condones gracias a los esfuerzos conjuntos con la Agencia de Naciones Unidas para el SIDA (ONUSIDA) y el Fondo de Naciones Unidas para ayuda a la Infancia (UNICEF), entre otros actores todos ellos comprometidos en diversas estrategias para asegurar la disponibilidad de condones en los campos y enseñar a la gente la manera más adecuada de ponerse un condón.
Fuente principal de esta nota de prensa: “UNFPA afronta un creciente número de partos y de violencia basada en género en el aniversario del terremoto en Haití”